miércoles, 30 de julio de 2008

Solo Resistir

Este Chinoy me sigue sorprendiendo...Aca una joyita de su poesia...


SOLO RESISTIR

Te acuerdas pateando un par de piedras brillabamos
profetas colgando de las piernas soñabamos
lloramos y aunque fue por montones no nos fue mal
recuerda que aunque apaguen tu huelga no es el final.

Tan libres ocultos bajo un sueño nuestra razón
marginales por no ser tan iguales fiel elección
sospechosos de este mundo de ojos nos calza igual
sinceros amar es lo primero para luchar.

Pero no, no lo sé
nunca pude comprender
cuan simpático solíamos sentir
solo resistir, solo resistir.

Te acuerdas pateando un par de piedras brillabamos
rasgueando meses sin una cuerda volábamos
gritamos y aunque nunca escucharon no es tan verdad
festivales de los saltos mortales en soledad.

Los niños preferidos del ruido como aguijón
hermosos de este invierno mocoso en el callejón
aparte fusion santos y locos nueva inyección
atento no queda otro momento mi corazón.

Pero no, no lo sé
nunca pude comprender
cuan simpático solíamos sentir
solo resistir, solo resistir
solo resistir, solo resistir.


Aca un video, del recital que hizo Chinoy en la Piedra Feliz.

lunes, 28 de julio de 2008

Allende 100 años


El 26 de Junio del 2008 se cumplieron 100 años del nacimiento de Salvador Allende...Acá sólo quiero recordarlo musicalmente, con 3 canciones hermosas...



ENCUENTRO CON LA VIDA

Qué puede hacer un hombre que está solo
solo con el mundo me refiero
sino vivir este combate por la vida
con tanta soledad que crece, aumenta.

Y en el rumbo que toma su mirada
que es la nuestra, nuestro pueblo
no es la herida que se abre en el país
la llaga inmensa es más perfecto
es dejar atrás la muerte, allá tan lejos.

Y es aquel su corazón
que cae para siempre
y es aquel que disparando
para siempre
amó la patria
y es aquel que en esta muerte
abrió las anchas alamedas
para siempre.

Un hombre disparando para siempre
su sangre en mi canción, un hoyo enorme
deja latir un corazón que al beso llega
y que otro hombre necesita en esta lucha.

Y es aquel su corazón
que cae para siempre
y es aquel que disparando
para siempre
amó la patria
y es aquel que en esta muerte
abrió las anchas alamedas
para siempre.


ALLENDE

Exacta amaneció la luz del día,
exacta en su perfil la madrugada,
cuando de pronto el viento agudo de Septiembre
hizo callar tu vida, tu voz y tu mirada.

Se fue tu cuerpo a la extensión del sueño
mientras tu sombra caminaba a tu encuentro
y poco a poco te alejaste de ti mismo
hacia el recinto del amor definitivo.

El Tiempo no se muere con tu tiempo
a pesar de la invariable
dispersión en tu distancia,
pero aprende la certeza
que en toda lontananza
la Historia pertenece a tu destino.

Se siente, amanece... ¡Allende!

Alzabas el destello en primavera
abriendo nuevo espacio a los sentidos,
con sólo ansias de justicias necesarias
para cumplir así los signos prometidos.

Pregunto entonces por tu asombro entero
desde el umbral del momento decisivo,
si tus ojos anunciaban el otro tiempo
de lo posible que hoy en día es desafío.

Pregunten por su aliento detenido
quienes por vida y omisión
no conocieron su palabra,
pues no escapa a la evidencia
que su vida, sin tardanza,
reclama una presencia en el camino.



ALLENDE

Presidente:
he marchado por las calles del mundo,
las plazas y los parques,
los lagos, los volcanes,
los ríos memorables,
los páramos, las ruinas,
los trigales, los bosques llenos de voces verdes
en busca de tu nombre
y allá encontré tu nombre.
He pescado botellas en el mar con tu rostro
dibujado en oscuros papeles navegantes,
y poemas tallados a cuchillo en las mesas
de bares infinitos, cerca del fin del mundo,
pero en Chile, tu patria,
no hay nada que te nombre.

Tú no estás en las calles de Chile, ni en sus muros,
no estás en los mercados ni en las escuelas rotas,
pero sí en la memoria de los que defendiste
con tu ideal, tus manos y tu muerte inmortal.

Nada, nada, sólo el amor de tu pueblo, Allende.

Presidente:
está escrito tu nombre en una estrella,
y Salvador Allende se llaman los tranvías,
los barcos castigados que surcan el oleaje,
los trenes sudorosos de aceites y de lluvia,
pero en tu patria nada lleva tu nombre, Allende.

No volverás jamás puesto que no te has ido.
No partirás jamás puesto que te quedaste.
No borrarán tu gesto ni esconderán tu sangre,
ni harán de tu legado un manuscrito muerto
pues eres parte altiva de la historia de Chile.

Tú no estás en las calles de Chile, ni en sus muros,
no estás en los mercados ni en las escuelas rotas,
pero sí en la memoria de los que defendiste
con tu ideal, tus manos y tu muerte inmortal.

Nada, nada, sólo el amor de tu pueblo, Allende.

Hay que escribirte en las murallas,
hay que sacarte del silencio,
hay que romper la cordillera para que vuelvas a caballo,
hay que abrir huecos en el cielo para que bajes como un rayo,
hay que abrir tumbas y panteones para que subas de la muerte
porque no hay nada que nos una como tú, Salvador Allende.

domingo, 27 de julio de 2008

Para el Final, de Chinoy

Siempre que se llega el término del camino queda la sensación de querer más...



PARA EL FINAL

Cayó una ojera
en el papel
cuna primera
de un mal ayer
oyendo oyendo oyendo
escucho hasta no ver.

Bajo las penas
me las gane
la luz sin cera
me hizo llover
ardiendo ardiendo ardiendo
su soplo y va a doler.

Para el final
quería más
y estuvo tu voz
y estuvo tu voz.

Para el final
quería más
y estuvo tu voz
y estuvo tu voz.

Dentro del aire
hoy desperté
empezó el baile
no me quedé
huyendo huyendo huyendo
sin fiesta celebré.

Nada era mío
mucho tomé
si hacía frío
no me abrigué
sabiendo sabiendo sabiendo
al viento puse fé.

Para el final...

Testamento de Pablo Neruda

Ortiga interpreta de manera notable un texto de Pablo Neruda...Por favor, solo escuchenlo..



TESTAMENTO

Dejo a los sindicatos
del cobre, del carbón y del salitre
mi casa junto al mar de Isla Negra.
Quiero que allí reposen los maltratados hijos
de mi patria, saqueada por traidores,
desbaratada en su sagrada sangre.

Cada dia quiero dormir
entre párpados de mar y tierra
Compañero enterradme en Isla Negra,
frente al mar que conozco, a cada área rugosa
que mis ojos perdidos no volverán a ver.

Quiero ser arrastrado
hacia abajo por las lluvias
y luego seguir la primavera profunda que renace.

Ésta es mi casa, hermano
que levanté luchando en la pobreza
aquí tienes la paz que te destino
Dejo mis viejos libros
a los nuevos poetas de América,
a los que un día hilarán
significaciones del mañana.

Aquí me quedo
con manos consteladas golpeando a mi puerta.
Aquí dejo arregladas estas cosas
hoy que los pistoleros pasean
la "cultura occidental" en brazos,
paro ya de contar.

Yo no voy a morirme. Salgo
ahora, en este día lleno de volcanes
hacia la multitud, hacia la vida.