lunes, 28 de junio de 2010

El huracán lleva tu nombre

"Me voy a la cama contigo.
Esto es lo primero que pienso cuando la veo entre la pe-
numbra y el humo de la discoteca. Es una mujer muy bella,
más joven que yo, de ojos chispeantes y nariz angulosa. Me
gusta como nadie me ha gustado nunca. Me aburro en una
esquina de la barra tomando una coca-cola. Me acompaña
Sebastián, mi amigo y, secretamente, mi amante. Sebastián
es actor de telenovelas y obras de teatro; a mí me conocen
por mi programa de televisión. A Sebastián le gusta bailar
y por eso ha insistido en traerme esta noche al Nirvana, don-
de se reúne la gente bonita y confundida de la ciudad, los
los que quieren irse del país pero no pueden y los que se fueron
pero regresaron, las chicas rebeldes y los cacainómanos, los
actores de pacotilla y los músicos fracasados, los tontos como
yo, que no bailamos porque no tenemos suficiente coraje (ya
bastante tengo que hacer el ridículo en la televisión), pero sí
disfrutamos exhibiéndonos en ese enjambre de cuerpos ha-
cinados que las luces de neón iluminan al azar. Yo no quiero
bailar, sólo mirar a Sebastián, alto y orgulloso, apretado en
sus jeans de actor que sueña con ser roquero famoso, lindo
con su cara de niño bueno que, sin embargo, es un depreda-
dor en la cama y yo lo sé bien, y por eso no puedo dejar de
mirarlo, porque es el primer hombre que me ha hecho el
amor con una ferocidad que no puedo olvidar y que me hace
desearlo tan descaradamente como lo miro esta noche tu-
multosa en la barra del Nirvana...

Gabriel ama a Sofía pero también le gustan los hombres. Gabriel tiene mucho éxito en televisión, pero lo que ansía de verdad es huir del Perú y dedicarse sólo a escribir, lejos de la ambigüedad y de la hipocresía que lo envuelven y lo limitan.

El huracán lleva tu nombre es una singular historia de amor, dolorosa y gozosa a la vez, con una heroína, Sofía, que fascina por su capacidad de amar, y con un original antihéroe, el narrador, Gabriel, que expone al lector su conflicto a través de una sinceridad a veces hilarante y a veces conmovedora. Una novela que no va a dejar a nadie indifirente.

El huracán lleva tu nombre
Jaime Bayly
464 Páginas
1era Edición Enero 2004
Planeta

miércoles, 23 de junio de 2010

La prisionera

"Soñaba con una hoguera. Un fuego amable que no quemaba. Se podría entrar en él y salir indemne. Más que eso, sanado. Sus ro- pas ardían pero su piel parecía intacta, delicio- samente fresca y nueva..."Papito". Alguien lo llamaba desde muy lejos, desde una región tan antigua de su alma que ya la había dado por in- existente, como esa piel del sueño. No había de qué preocuparse, le diría a la niña con la que soñaba. Que lo dejara dormir; éste era el buen fuego, el que curaba."

La prisionera
Carlos Franz
172 Páginas
1era Edición Agosto 2008
Alfaguara

Momo

Momo es una niña huérfana, que vive en un anfiteatro. Pero aun siendo huérfana, tiene muchos amigos y nunca se siente sola. Todos los días sus amigos vienen a verla, a traerla comida y a hablar con ella. Vienen a hablar con ella por una sencilla razón: Momo sabe escuchar, sabe decir lo que piensa sin decir una sola palabra.

Cada día, Momo juega con sus amigos, cada día inventan nuevos juegos, cada día, es distinto. Y lo mejor de todo es que no se aburren. Y en caso de que pueda existir una sola gota de aburrimiento, Gigi – uno de los dos mejores amigos de Momo – se inventa una de sus fantásticas historias. Como Gigi nunca repite una de sus historias, siempre crea un gran revuelo y es escuchado atentamente por todos los oyentes.

Todo iba bien en la vida de Momo y sus amigos, hasta que desafortunadamente, aparecieron los hombres grises. Estos extraños personajes, iban vestidos con un traje gris, un bombín gris y en su boca siempre había un cigarro gris. Los hombres grises iban por la calle sin llamar la atención, buscando sus víctimas. Su objetivo era robar el tiempo a todas las personas que pudieran, almacenando ese tiempo para ellos. Los hombres afectados por el plan de los hombres grises, querían gastar el menor tiempo posible y ahorrar el mayor tiempo. Cuanto más tiempo ahorraban, más tiempo necesitaban para seguir ahorrando, de manera que se crea un círculo vicioso.

"En los viejos, viejos tiempos, cuando los hombres
hablaban todavía muchas otras lenguas, ya había en los
países ciudades grandes y suntuosas. Se alzaban allí los
palacios de reyes y emperadores, había en ellas calles
anchas, callejas estrechas y callejuelas intrincadas, magní-
ficos templos con estatuas de oro y mármol dedicadas a
los dioses: había mercados multicolores, donde se ofrecían
mercaderías de todos los países, y plazas amplias, donde
la gente se reunía para comentar las novedades y hacer
o escuchar discursos. Sobre todo, había allí grandes
teatros. Tenían el aspecto de nuestros circos actuales, sólo
que estaban hechos totalmente de sillares de piedra. Las
filas de asientos para los espectadores estaban escalonadas
como en un gran embudo. Vistos desde arriba, algunos
de estos edificios eran totalmente redondos, otros más
avalados y algunos hacían un ancho semicírculo. Se les
llamaba anfiteatros."


Momo
Michael Ende
255 Páginas
1era Edición Octubre 1992
Alfaguara

sábado, 5 de junio de 2010

Yde repente, un ángel

"Soy un cerdo. Mi casa está inmunda. No la limpio hace
meses. Nadie viene a limpiarla. No me gusta que entre
gente extraña. En realidad, no me gusta que entre na-
die, salvo Andrea..."

Segundo libro que leo de Jaime Bayly y quedé fascinado. Un relato simple, directo, conmovedor.

Julián Beltrán es un escritor que nunca limpia su casa. Cuando Andrea, su novia, le exige que lo haga, él decide contratar a una mucama. Y la llegada de Mercedes, una criada envejecida y fiel, va a despertar la ternura y el instinto de protección del hombre. Ella le cuenta como fue vendida a los diez años por una madre cargada de hijos a los que no podía mantener, y entonces el escritor siente la necesidad de ayudar a Mercedes a encontrar a su madre. Pero la búsqueda estará llena de azares y de episodios cómicos, a la vez que dejará al descubierto al auténtico y frágil Julián, distanciado también de su padre, aunque por motivos bien diferentes pero a los que se deberá enfrentar. Esta historia de una amistad improbable y de reencuentros familiares constituye el relato más brillante de Jaime Bayly, que nos cautiva desde el primer momento por su insólita habilidad para ir de lo grave a lo hilarante.

Y de repente, un ángel
Jaime Bayly
244 Páginas
1era Edición Noviembre 2005
Planeta